Partido difícil de olvidar, uno de esos que extremecen, de calidad y lucha laborioso de encontrar en cualquier deporte. Dos equipos de campeonas en combate por una de copas. Y fue Ros el triunfador, como podía haberlo sido Salamanca. Victoriosas por cuarta vez consecutiva. Hecho que tan amargo sabor de boca dejó, especialmente en Isabel Sanchez, imagen viva de la abstracta impotencia.
Ya el comienzo del partido se presentaba esperanzador para los amantes del juego. Una lucha encarnizada entre Milton - Jones y Sancho Lyttle eliminaba cualquier atisbo de aburrimiento. Aunque los primeros instantes fueron algo dubitativos para ambos equipos, pronto Willingham cargó su brazo y con dos triples consecutivos logró abrir el marcador. Sin duda resultó el cuarto de la americana que alcanzó los 11 puntos y 3 de 4 en tiros de 3. Milton - Jones le pisaba los talones muy de cerca realizando minutos espectaculares. El público salmantino eufórico como pocos, parecía tomarla con Valdemoro y con las decisiones arbitrales, pero en el segundo cuarto todo cambió. Gorbunov tomaba el relevo de Willingham y procuraba hacer suyo cada balón. Becky Hammon intentaba crear juego moviendo rápidamente el balón a la vez que lo recuperaba magistralmente en un par de ocasiones. La defensa de las salmantinas sobre Valdemoro logró invalidar su juego y posicionarse a tan sólo un punto de Ros al finalizar la primera parte del encuentro. Laia Palau cerraba la primera parte con un espectacular triple a la altura de medio campo.
